Sandra Massimino y Beatriz Gómez en FM del Este, en el Día Internacional de la Mujer

Por el Día Internacional de la Mujer escuchamos a dos mujeres que opinan de lo que esta pasando, en el programa que conduce Alberto Sabini. Piden volver a los viejos valores, a la “educación de excelencia” y hablan de cómo se gestaron las nuevas generaciones en base a un modelo de país que no pone el acento en el trabajo. Son la Concejal Sandra Massimino, de Juntos por el Cambio y  Beatriz Gomez, Secretaria Adjunta del Partido Socialista de Berazategui. De dos líneas políticas diferentes concuerdan en muchos aspectos. 

“Hay muchas argentinas luchadoras. El tiempo nos llevó a obtener lugares pero aun hoy así cuesta que las mujeres sean respetadas. En nuestro país, por ejemplo, en la Corte Suprema de Justicia no hay mujeres y el cupo político es una ley que impone que las mujeres puedan tener un lugar porque sino tampoco lo tendríamos- estimo Sanara Massimino- por otro lado tampoco tenemos muchas ministras, solo dos. Si, cuesta que la mujeres seamos reconocidas, pero hay que seguir luchando”.

La actual concejal recordó además que “hasta no hace mucho no había mujeres traumatólogas, porque decían que no tenían fuerza para mover los huesos, cosas que se decían para no darle lugar en definitiva. Tampoco había mujeres en la fuerza… hoy manejan helicópteros, hay mujeres Gendarmes, en Prefectura, en las Policías, en las Fuerzas Amadas. Esto obligó que se fueran agregando baños y hace cinco años atrás, no muchos más, cambiaron muchas cosas, seguimos ganando terrenos para las mujeres”.

Massimino argumentó que durante el kirchnerismo, “Tuvimos mucho para la foto y poco para los hechos. Se gastaba fortuna en los ministerios mientras los niveles de violencia están cada vez más altos. Porque necesitamos leyes, pero  que se apliquen, tener un ministerio de la mujer y que no se cumplan las leyes no sirve. Hoy tenemos que trabajar mas que nunca, buscar soluciones para que se terminen los femicidios de una buena vez”.

Rescató que “hay asociaciones civiles que están trabajando muy bien”, pero como contrapartida, “las estadísticas de violencia son cada vez mas altas”.

La concejal es mamá, esposa, política abogada,…”las mujeres tenemos la habilidad de hacer de todo, llegas a tu casa y te sacas los zapatos. El año pasado terminó mi hijo el secundario y fue terrible con el UPD, con el viaje a Bariloche, todo cuesta arriba, pero podemos, porque tenemos una rutina diaria” describió.

Antes de cerrar opinó: “Venimos de años de decadencia. La Argentina es resilente, porque somos un pueblo pasivo, nos dan un plan que no nos permite vivir dignamente y lo aceptamos. Se acostumbraron a vivir con poco, pero menos del piso no podemos bajar. Piensen que los planes sociales son puro clientelismo político que no deja de someter a un grupo de gente, la realidad es que no hay trabajo y  nadie se preocupó por gestionarlo. Hay que comenzar a abrir fabricas, que vuelva la cultura del trabajo. El plan es un parche antes que nada, pero el país necesita otra cosa.  No hay ética ni moral porque con todo se perdieron las buenas costumbres”.

Por otro lado el dialogo fue con Beatriz Gómez, secretaria adjunta del Partido Socialista de Berazategui. “El ministerio de la Mujer solo fue libertinaje. Porque nunca se preocuparon que hay lugares en el interior del país donde las mujeres aun no tienen agua, toman agua de charco, y que hacemos por esa gente…nada, por eso considero que no somos buenos, solo estamos acostumbrados a dar lo que nos sobra. Y la realidad actual es una bola de nieve, que cayo después de años de manipulación y corrupción. Es la consecuencia de muchos años de libertinaje”.

Gómez pertenece a un partido donde la mujer tuvo preponderancia. Fue Alicia Moreau de Justo quien lucho mucho por los derechos de las mujeres en una época donde las mujeres tenían que luchar mucho mas que ahora. “No había por ejemplo un baño en la facultad y Moreau quería ser doctora. Entonces tuvieron que construir un baño y los hombres estaban enojadísimos. Pensemos que la mujer voto en San Juan en 1928,  y el 98 por ciento fue a votar . Calingasta tuvo la primer mujer intendente y una primera diputada provincial. Estaba sola, en una Cámara llena de hombres., esa era la foto. Esa fue una lucha que hay que recordar porque parece que todo en la Argentina se fundó a partir de 1945 y en realidad muchas mujeres trabajaron antes. Se dejo de votar porque los hombres se enojaron porque las mujeres no cocinaban y esperaban otro trato”.

La dirigente socialista dijo no estar de acuerdo “con lo del cupo femenino”. Y admitió: “Lo correcto es, yo puedo porque soy capaz, no porque me dejas. Hay mucho por lo que trabajar en cuanto a eso”.

Y dijo que “acá se desvirtuó mucho cuando tratando de conseguir espacios hay mujeres que se bajaron la bombacha adelante de la Catedral. Cuando lo vi pedí por favor que sacaran eso de los medios. No me representan nada esas mujeres.”

“Pensaba… las mujeres que iban a la facultad y luchaban por un lugar estaban tapadas hasta el cuello y cambiaron la historia.  La historia no se cambia escribiéndome las tetas, desnudas, pidiendo que maten al hombre. Esas mujeres no representan a nadie, porque cuando tuvieron que ir a defender a las mujeres que matan en los montes y las dejan en las rutas no van. Son las mujeres de Plaza de Mayo, del Congreso las que se han llevado un montón de dinero y no han cambiando absolutamente nada. Cambiar una letra en las palabras que decimos todos los días tampoco nos modifica como sociedad, ni nos hace crecer, esas solo dan vergüenza, esos grupos nos atrasan”.

Gómez opinó después que “muchas veces la mujer se somete al hombre porque no sabe valorarse, no sabe que no hay ninguna diferencia. Crié a mis hijos, y en muchos lugares todo lo de la casa recae sobre la mujeres y algunos hombres no lo registran. Pero todos debemos aportar”.

Confió que según los ingresos, “No somos clase media, sino media clase” y que “normalmente en muchos hogares, es la mujer la que se las ingenia para  poner la mesa, la atención de los hijos, todo recae sobre la mujer. Y a veces es una carga pesada cuando no hay recursos. Caímos como sociedad demasiado abajo. Tengo 75 años y a veces pienso que como sucedió que dejamos que nos hicieran esto. Si hacemos memoria empezamos con (Eduardo) Duhalde, con los 150 del Plan Trabajar. Los sindicalistas fueron perversos y nadie dijo nada, no defendieron nada, ni la fuente de trabajo. Ellos se llenaron los bolsillos, el marido se quedo en casa, porque se quedo sin trabajo y las cosas cambiaron. Eso hay que revertirlo, peleando en serio. En Europa les ofrecieron un subsidio y los sacaron a los corchasos. La gente quiere trabajar, no como acá que los mandaban a cortar el paso, a barrer la calle y así ahora cobran sin hacer absolutamente nada y tenemos a más de medio país subsidiado. Eso no puede ser más…” pidió.