PREVIO A LA COPA DEL MUNDO DE FRANCIA, SIMEONE, VERÓN Y BATISTUTA, ENTRE OTROS, DEJARON DE HABLAR CON LOS PERIODISTAS. LA POSTURA DEL DT PASSARELLA Y LOS DETALLES DE AQUELLA HISTORIA


Déjà vu: el día que la Selección de Passarella dejó de hablar con la prensa

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La postura del plantel actual de la selección argentina de no hablar más con la prensa no es nueva. El primer acontecimiento de esta naturaleza se dio en 1998, a pocos días para el inicio del Mundial de Francia 1998. Fue en Saint-Étienne cuando Daniel Alberto Passarella y todo el plantel de la Selección brindaron una conferencia de prensa anunciando la inusual medida.

El por entonces entrenador del combinado argentino fue el primero en explicar el porqué de la decisión. Si bien se mostró a favor de la postura de los jugadores, aclaró que él continuaría dialogando con los periodistas.

«Ellos están conscientes de que tienen que asumir la crítica del periodismo, cuando dicen que un jugador jugó mal, muy mal u horrible. Pero esto ya pasó un poco más allá de lo normal. Se han metido con la vida de los jugadores y esto es grave», sostuvo, a modo introductorio, el Kaiser.

Gabriel Batistuta también tomó la palabra y puso su ejemplo de cómo la prensa quiso crearle un conflicto con Simeone: «Estando así podemos evitar el problema que surgió el otro día cuando un periodista le comentó al Cholo algo que yo nunca dije».

Ante la recriminación de un periodista que se encontraba en la sala y que le pidió que no tomen una medida corporativa y lo arregle con la persona en cuestión, Bati contestó: «Yo no puedo jugar con vos porque vos me tiras una bomba y si yo te la desmiento vos escribís una semana, y eso les conviene a ustedes».

«Me parece que las cosas falsas no las dijimos nosotros. Nosotros no tenemos ningún interés en decirle al mundo que hay jugadores que se dopan o que estamos todos peleados. Si salió esto y está dando vuelta no es porque lo dijimos nosotros», cerró.

Haciendo un paralelismo con la actualidad, Infobae se comunicó con una persona importante que formó parte de aquella delegación para que brinde más detalles: «Son muchos los puntos en común entre aquel incidente y el actual. Como pasó ahora con la polémica entre el periodista Gabriel Anello y Ezequiel Lavezzi, esa medida en 1998 surgió luego de que la prensa filtrara un supuesto doping positivo de Juan Sebastián Verón y una salida con algunos jugadores».

Diego Pablo Simeone, capitán argentino, tomó la palabra después del DT. El Cholo leyó una carta elaborada por el plantel y que contenía lo siguiente:

«A través de nuestros familiares y amigos, sobre supuestos problemas internos dentro del plantel, hemos decidido cambiar el método de atención al periodismo. Para que haya más transparencia en las preguntas y en las respuestas, y que no dejen lugar a dudas. Queremos señalarles que en algunos casos nos provocan preocupación, porque atacan a la moral de las personas hablar mal de un compañero, casos de doping o imposibilidad física para jugar. Y en otros, nos causan gracia las peleas internas. Porque tenemos muy en claro que para alcanzar el éxito no hay otra forma de lograrlo que estando unidos y nosotros lo estamos, no tengan dudas. Estamos dispuestos a aceptar las críticas más duras en cuanto al rendimiento del equipo y a las individualidades, pero por favor no jueguen con las personas por una necesidad de llenar espacios, porque además del daño que ocasionan al jugador y a sus familias, perjudican la imagen de un país».

Asimismo, «el malestar del plantel estaba dado en que como había muchos enviados de programas de chimentos, se inventaban peleas casi todos los días. La más recordada era la de Germán Burgos con Leonardo Astrada; o el cruce entre José Chamot y el periodista Román Lucht», agrega la fuente que pidió quedar en el anonimato.

Además, otro punto similar al actual, y que grafica por qué la relación entre la prensa y el plantel estaba rota, fue que los periodistas le recriminaban a los jugadores que hablaban solo para los medios españoles e italianos, donde la mayoría se desempeñaba, y no lo hacían con la prensa local.

Esta medida corporativa se respetó durante todo el Mundial. Sin embargo, como FIFA obliga a los jugadores a dialogar con la prensa, ellos tomaron la decisión de hacerlo todos juntos, los 22. Algo similar a lo que ocurrió anoche, en la conferencia de prensa encabezada por Lionel Messi.