UN SUBOFICIAL QUE SE DESEMPEÑABA EN EL CUARTEL CENTRAL LOCAL FUE DETENIDO, ACUSADO DE DELIVERY DE DROGAS. EL CASO PROVOCÓ LA SORPRESA Y LA BRONCA DE SUS COMPAÑEROS


Cayó narcobombero

En el Cuartel Central de Bomberos Voluntarios de Berazategui cayó como una bomba la detención de un suboficial de dicha sede, acusado de delivery de drogas.

Efectivos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires se llevaron al bombero desde el citado cuartel, ubicado en calle 14 y 145, en pleno centro de la ciudad, luego de una investigación judicial que incluyó escuchas telefónicas.

La Policía, según trascendió, inspeccionó el auto y efectos personales del imputado, quedando el acusado a disposición de la UFI Nº 20 de Quilmes, a cargo de Clarissa Antonini.

De acuerdo a fuentes judiciales, el bombero recibía llamados de potenciales clientes y entregaba la cocaína en lugares que previamente pactaba, siempre fuera del Cuartel Central de Bomberos Voluntarios de Berazategui.

La detención surgió luego de una minuciosa investigación, tras la cual el juez Gustavo Mora -del Juzgado de Garantías Nº 7 de Quilmes-  determinó las instancias que derivaron en la detención del bombero.

En el Cuartel Central de Bomberos Voluntarios de Berazategui  la detención de uno de sus compañeros cayó como un baldazo de agua helada, dado que nadie sospechaba nada.

«Te imaginás que después  de compartir tantas salidas, de salvar a tantas personas, no podés entender cómo puede pasar esto», señaló uno de sus compañeros en off.

Asimismo, pidiendo reserva de identidad, otro compañero se quejó: «no puedo creer que hablen de narcobomberos, cuando acá nos esforzamos todos los días arriesgando nuestras vidas para brindar el mejor servicio a la comunidad. Al margen de lo que resuelva la Justicia, los bomberos seguiremos siendo los servidores públicos».

Por su parte, el jefe del Cuerpo Activo de Bomberos, Sergio Tealdi, señaló a los medios de prensa que el acusado «era un excelente suboficial. Ninguno de los que compartimos la actividad con él imaginamos esto», sostuvo en un breve comentario.

Al mismo tiempo aclaró que el imputado «de ninguna manera usaba el Cuartel» para la comercialización de los estupefacientes y fue más contundente aún al señalar: «que lo hayan detenido en el Cuartel no significa que este lugar sea un aguantadero. Lo vinieron a buscar acá porque los cuarteleros realizan turnos de 24 horas y era mucho más fácil encontrarlo en su puesto de servicio».