SE DESEMPEÑARÍA EN AVELLANEDA. SIMULÓ REALIZAR UN ALLANAMIENTO EN EL BARRIO LA CAPILLA PARA ROBAR. FINALMENTE FUE DETENIDO POR EFECTIVOS VARELENSES


Aprehendieron a un sargento acusado de cometer entradera

Un policía de la provincia de Buenos Aires, de rango sargento y que se desempeñaría en Avellaneda, fue aprehendido por efectivos policiales de Florencio Varela, imputado por el delito de entraderas y del robo de un auto de alta gama.

Todo comenzó cuando el acusado, junto a otros dos sujetos, simulando llevar a cabo un allanamiento en una casa en la localidad de La Capilla, ingresaron a su interior mostrando identificación policial y refiriendo ser de numerarios de la DDI Quilmes. Una vez dentro del domicilio, exigieron la entrega de dinero que la víctima poseía en el interior de su caja fuerte, como así también sustrajeron teléfonos celulares del duño de casa y de su esposa e hijos, para luego sujetarlos con precintos y darse a la fuga.

Las víctimas lograron quitarse los precintos y alertar al personal de la Policía Local. Allí el propietario les informó lo sucedido y que además, les habían sustraído un Peugeot 5008 de su propiedad. Agregó que el ladrón tenía dos cómplices que lo apoyaban en un Audi A1.

Así se organizó un rastrillaje y los uniformados, en Estados Unidos y Davidson, interceptaron al Audi A1 en el que circulaban los delincuentes. En la identificación, se estableció que el conductor era el sargento de la Policía Bonaerense, quien antes de detener su marcha se descartó tres teléfonos celulares.

Paralelamente se efectuó un operativo cerrojo que permitió efectivizar el hallazgo del Peugeot 5008, aunque sin sus ocupantes. Se dejó constancia de que el aprehendido portaba arma Taurus 9mm, de la cual se investiga procedencia.

En tanto, el policía detenido fue reconocido por la víctima como quien le apuntara hacia su humanidad dentro de su domicilio. Al momento personal de Policía Científica efectuó una requisa al Audi A1, logrando hallar en su interior un bolso con dinero (suma superior a 50.000 pesos) y de la requisa del baúl, se logró incautar varios precintos; un equipo de comunicación portátil; chalecos reflectivos y una gorra de la Policía; una barreta; una pinza corta candados; binoculares de largo alcance; herramientas varias; guantes y postas de goma y de guerra.